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La ayurveda es una terapia natural creada hace más de 5000 años. Con origen en la India, en los últimos años gracias al desarrollo de prácticas de salud complementaria y alternativas naturales, la ayurveda se ha ido extendiendo por todo el mundo, tal y como lo recoge la Organización Mundial de la Salud.

El objetivo de la ayurveda se centra en facilitar una vida larga, sana y equilibrada, sin necesidad de medicamentos, cirugías complicadas o sufrimiento por dolencias. Tal y como señala un estudio de la Universidad de Maryland, la ayurveda puede tratar problemas inflamatorios, hormonales, digestivos y afecciones inmunitarias

Esta terapia se apoya en una dieta sana, cambios en el estilo de vida, alivio del estrés y en el empleo de diferentes hierbas como medio para reestablecer el equilibrio en el cuerpo. Igualmente, contempla que toda enfermedad es resultado de la mezcla entre los tres doshas, que son formas de categorizar tres tipos de energía en el cuerpo y que se conocen como: vata, pitta y kapha.

• Las personas vata suelen tener una constitución ligera y delgada, realizan las actividades con rapidez, son entusiastas y cuenta con una gran imaginación, carácter y energía cambiante. En ellas predomina el elemento aire.
• Las personas pitta se caracterizan por predominar en ellas el elemento fuego. Tienen una constitución mediana, con tendencia a irritarse y enfadarse fácilmente, con la piel pálida o rojiza y pecosa, aversión al sol, carácter emprendedor, y el cabello rubio, castaño claro o rojizo.
• Las personas kapha tienen una complexión fuerte, energía firme, personalidad tranquila y relajada, y tendencia a la obesidad. En ellas predominan los elementos tierra y aire.

Al ayudar a equilibrar los tres doshas – evitando que una energía se torne demasiado dominante y otra sea desplazada-, la ayurveda nos libera del estrés, haciendo frente a los cambios y manteniendo nuestro cuerpo sano.

Pautas de la dieta ayurvédica

Como base de esta terapia, la dieta ayurvédica apuesta por el consumo de una gran variedad de plantas y alimentos con alto contenido en nutrientes. Estos incluyen hierbas frescas, especias, vegetales, grasas saludables, alimentos con una alta carga de antioxidantes, proteínas y tés.

Asimismo, las pautas generales de la ayurveda apuestan por consumir alimentos frescos, calientes y fáciles de digerir, siempre teniendo en cuenta diferentes variables como las costumbres, tradiciones y origen de la persona.

• Para las personas vata los alimentos han de ser muy nutritivos, cocinados, templados, húmedos y suavemente condimentados, con especias como el cilantro y el tomillo. Las personas vata pueden tomar productos lácteos, carne de pollo y pavo, pescado y frutas (pueden ser cocinadas), como las naranjas, los plátanos o los albaricoques.
• Para las personas pitta los alimentos han de ser de naturaleza fría, con pocas especias, de sabor dulce y algo de amargo y astringente. Espárragos, brócoli, coles, verduras de hojas, calabacín, manzana, pera, garbanzos y aceites de oliva, girasol y soja son alimentos recomendados.
• Para las personas kapha los alimentos deben ser ligeros, secos, tibios, condimentados, amargos y astringentes. La dieta debe ser rica en verduras. Evita los lácteos y la sal. Se recomiendan las berenjenas, la lechuga, el brócoli, las patatas, las lentejas y el jengibre.

En esta dieta es muy importante la rutina, llevando siempre los mismos horarios. Igualmente, variará en función de la estación del año. En otoño la dieta recomendada es la de la condición vata. Durante el invierno y hasta principios de primavera, debe hacerse la kapha. Y desde finales de primavera y durante el verano, la dieta debe ser la aconsejada para las personas pitta.

Si te interesa este tipo de nutrición, te recomendamos que acudas a un especialista que realizará un análisis de tu tipo corporal. Así pautará las recomendaciones ayurvédicas más adecuadas para ti en cada momento.